El deshidratador de alimentos no lo consideraría un aparato de cocina indispensable, pero si tienes uno podría resultar muy útil para la preparación y conservación de determinados alimentos como frutas, verduras y hierbas aromáticas de temporada que tengas en tu huerto. En este caso, las ventajas de tener un equipo para deshidratar alimentos pueden ser varias.
Si te estás planteando comprar uno de estos aparatos para deshidratar alimentos en casa y buscas opiniones, en este post te hablaré del modelo que utilizo actualmente (Klarstein KG3 Bananarama) y algunos consejos que podrían resultarte útiles para elegir uno.
En este artículo encontrarás:
Pros y contras del deshidratador para alimentos Klarstein KG3 Bananarama
El Klarstein KG3 Bananarama es el deshidratador de alimentos que utilizo. Para conocer todas las características de este modelo, puedes ir a la página del fabricante donde podrás leer todo los detalles e incluso descargar el manual de instrucciones si quieres hacerte una idea de cómo funciona. También, el mismo modelo está en color amarillo.
A continuación, voy a apuntar las ventajas y desventajas que he experimentado utilizando este modelo de Klarstein.
Pros:
- Es un deshidratador de alimentos bastante barato que ofrece una buena relación calidad/precio.
- Muy ligero, fácil de montar y se limpia fácilmente.
- El funcionamiento también es muy sencillo. Además, con el temporizador y el regulador de temperatura podrás garantizar un secado más preciso.
- Materiales de calidad.
- No es ruidoso.
Contras:
- Las bandejas son de plástico y podrían romperse al caer. Por lo que siempre intento manejarlas con mucho cuidado.
- Las bandejas, de nuevo, se encajan la una en la otra y cuando tienes que controlar los alimentos tienes que ir sacando las capas, lo que no es nada cómodo. Sobre todo, si tienes poco espacio en la cocina.
- Es un aparato que no ocupa muchísimo espacio, pero esto es relativo. Tienes que tener sitio donde guardarlo si no lo utilizas a menudo o no tienes un lugar para dejarlo a mano en tu cocina.
- Zona de ventilación está en la base y el aire caliente se distribuye pasando por la parte central lo que hace que las bandejas tengan un agujero por el medio. Este espacio no podrás aprovecharlo para colocar alimentos, lo que me parece un desperdicio
Finalmente, después de haber probado este equipo de deshidratación de alimentos te lo recomendaría solo si crees que lo vas a utilizar de vez en cuando. No porque no sea de calidad o haya tenido algún problema, sino por un tema de comodidad como te he comentado.
Ahora bien, tras el aprendizaje y la experiencia con este primer modelo, para mí el deshidratador sí es un utensilio muy útil para cocinar sano. Pero para poderlo aprovechar al máximo te recomiendo que dediques un poco de tiempo para investigar cuál es el modelo más conveniente para ti.
A continuación, te señalo algunos detalles que he apuntado después de la experiencia con el modelo Bananarama de Klarstein.
Guía de compra de un deshidratador de alimentos: 5 claves para elegir el mejor
Como pasa con la mayoría de los utensilios de cocina, hay muchos factores a tener en cuenta a la hora de adquirir uno nuevo. Sobre todo si no hemos tenido uno parecido antes.
Por eso, cuando empieces a buscar el aparato para deshidratar comida ideal para tus exigencias, te sugiero tener en cuenta algunos detalles:
- Uso: antes de comprar un deshidratador, te sugiero que pienses bien cuánto lo vas a utilizar. Si es algo que emplearás muy de vez en cuando, creo que cualquier modelo más económico te puede servir. En cambio, si piensas elaborar frutas, verduras, galletas, crackers y otros alimentos deshidratados muy a menudo, en mi opinión deberías adquirir uno de los modelos con sistema de ventilación lateral y bandejas modulares extraíbles lateralmente. En este punto insisto un poco, pero es que el sistema de encaje de las bandejas no lo considero para nada cómodo. Además, las bandejas de metal extraíbles lateralmente son más resistentes y fáciles de limpiar.
- Capacidad: casi todos los deshidratadores tienen un sistema de bandejas modulares, que puedes montar en base a la cantidad de alimentos que prepares. Si compras uno con 6-8 bandejas, piensa que podrás utilizar todas o solo algunas a la hora de preparar tus recetas. Mejor que sobren, ¿no?
- Funcionalidad: estudia bien el funcionamiento de los deshidratadores que están en tu lista de favoritos. Si nunca has utilizado un horno para deshidratar deberías hacerte una idea de cómo funciona. Para mí personalmente es imprescindible el medidor de temperatura y el timer para programar los tiempos. Además, soy partidaria de las bandejas que se extraen lateralmente, puesto que con estas puedes colocar los alimentos en toda la superficie de la bandeja e intercalar las posiciones si necesitas más espacio entre una bandeja y otra.
- Potencia: el modelo de deshidratador que utilizo tiene una potencia de 550 watts y puedo decir que es bastante rápido en la preparación de los alimentos a pesar de no ser de los más potentes en el mercado. Aquí, también, si sabes que vas a utilizar muy a menudo la máquina para deshidratar te sugiero que mires algún modelo que te garantice alto rendimiento. Los modelos de gamas superiores deshidratan los alimentos en tiempos más rápidos y te permiten preparar mayores cantidades a la vez. Si lo quieres para tu negocio ya deberías mirar deshidratadores para uso comercial que te permitirán deshidratar grandes cantidades de alimentos y ahorrar energía.
- Precio: hay deshidratadores para uso familiar muy económicos por 50 € y otros de hasta de 300 € o más. El importe es seguramente relacionado con la calidad y la eficiencia del aparato, pero, a no ser que lo necesites para producción profesional, quizás no hace falta que te gastes un capital.
Conclusiones: ¿qué deshidratador de alimentos comprar?
Después de la experiencia con mi primer deshidratador de alimentos, si fuera a comprar uno nuevo ahora, probablemente sería otro modelo, pero repetiría con la marca. La verdad es que a pesar de los inconvenientes de las bandejas que te comentaba, la calidad de los materiales y el funcionamiento son impecables. Esta vez optaría, sin duda, por un modelo con bandejas metálicas y extraíbles lateralmente como el Klarstein Fruit Jerky Plus 6.
En conclusión, ¿quieres saber si te recomendaría comprar un deshidratador de alimentos? La respuesta es sí. Si me preguntas qué deshidratador comprar, en cambio, mi respuesta es: depende.
Como te comentaba el deshidratador de frutas y verduras es un utensilio para cocinar que tiene sus ventajas e inconvenientes y te sugiero que tengas en cuenta las pautas que te he señalado más arriba hasta encontrar el que responda mejor a tus exigencias. Espero que mi opinión te pueda ser útil en este proceso.
¿Ya has decidido qué deshidratador de alimentos es ideal para ti? Puedes compartir tu experiencia si quieres o si tienes alguna duda puedes dejarme un mensaje abajo en los comentarios. ¡Estaré encantada de ayudarte!
Muy buena la explicación. Quiero aprovechar las frutas de estación y no siempre el clima lo permite, así que decidí comprar el deshidratador
Hola María Cristina, Muchas gracias por leerme 🙂 Espero lo aproveches mucho, se pueden hacer muchas cosas además de las frutas deshidratadas con el deshidratador de alimentos 😉 Un saludo!