¡Vive la ciudad al rítmo SlowMov!

Me hace mucha ilusión estrenar la nueva sección del blog dedicada a los encuentros con personas y empresas que promocionan estilos de vida más sostenibles, productos y actividades relacionadas con la naturaleza. Hace meses que le daba la vuelta al tema y siempre tenía miedo a añadir más tareas a mi agenda, pero las cosas han progresado con el ritmo oportuno y ya tenía ganas de salir con esta sorpresa 🙂

Y para inaugurar esta nueva etapa de Notas Naturales he decidido dedicar el primer post a SlowMov, un proyecto que he tenido la oportunidad de conocer desde sus primeros pasos y ver su evolución en el tiempo ha sido muy inspirador.

SlowMov Barcelona es la primera agencia de difusión de vida slow en España. Es una idea que ha crecido alimentada por las inquietudes y reflexiones de cuatro jóvenes, Carmen, Astrid, Nadia y François, y ha sido impulsada por la confianza y compromiso de pequeños productores, que representan el alma de esta agencia.

He encontrado el equipo de SlowMov a principio de junio, en su acogedor espacio en el barrio de Gracia en Barcelona. El local, inaugurado hace unos meses, es muy agradable y tiene un precioso patio interior, con sofás y varias plantas que decoran y contribuyen a crear un ambiente relajante.

Aquí es donde el equipo de SlowMov realiza reuniones y organiza el trabajo.

La agencia es muy joven pero prometedora. Durante el encuentro, Carmen y Astrid me han explicado más detalles sobre el proyecto.

“Cuando surgió la idea de crear una plataforma relacionada con el estilo de vida slow, encontrábamos poca información online. Nos identificabamos en parte con el movimiento SlowFood, una filosofía de vida más consciente que nace en Italia (y hoy en día es reconocida a nivel internacional), que se propone de devolver a los alimentos su valor, respetando a los productores y en armonía con el medioambiente”- comenta Carmen.

SlowMov, me explican, vivió una primera etapa online mientras Carmen y François transcurrían un tiempo en París, trabajando y estudiando, y Astrid trabajaba y vivía en Barcelona. En esos meses las reuniones eran frecuentes y la distancia no impidió el desarrollo de la idea: así, a principio de 2014, el proyecto empezó a hacerse realidad con la creación de un blog donde inicialmente se recopilaban experiencias de vida cotidiana, reflexiones e inspiraciones para un modelo de vida más consciente.

Sin embargo, las inquietudes seguían siendo muchas…

“Buscábamos el modo de crear algo más tangible, más cercano a las personas  – puntualiza Carmen – queríamos ofrecer a la gente unas gafas mágicas, que permitieran ver el mundo de otra forma.”

Del mundo virtual al barrio de Gracia

La creación del blog, ha representado un primer paso en el desarrollo de SlowMov: ha permitido empezar a difundir la idea y conocer la opinión de consumidores y productores locales. También gracias a los feedbacks de los seguidores del blog, la convicción de que había que pasar de lo virtual a lo físico se hizo aún más fuerte.

“Sentimos la necesidad de proponer un espacio que pudiera permitir las conexiones entre personas que siguen un estilo de vida slow” – explica Astrid.

Después de varias reuniones, aprendizajes y feedbacks, con Carmen y François de vuelta a Barcelona, los cuatro juntos empiezan a trabajar para poner orden a las ideas y pasar de la red al barrio.

En abril de 2015, después de muchas reuniones, encuentros con productores y mano de obra, SlowMov inaugura su agencia en el barrio de Gracia en Barcelona.

La voluntad de cambiar las cosas les ha llevado a realizar un espacio de difusión de vida slow que incorpora y promociona una red de pequeños productores para llegar a los consumidores con productos locales que rescatan el valor y la importancia de comer ecológico y local.

¿Qué es SlowMov Barcelona hoy?

Astrid: Proponemos un estilo de vida y de consumo slow, acercando el productor al consumidor.
¡En la ciudad a veces estamos tan desconectados del suelo! El objetivo de SlowMov es llevar a la ciudad el significado de producción local y artesana. Producir ecológico significa sacrificio; la visión poética del estilo de vida slow es solo una faceta de este modelo, detrás están las dificultades de sobrevivir en el mercado y los sacrificios de un trabajo duro, lento, cuyo resultado es a veces imprevisible.

¿Cómo difunde el estilo de vida slow?

Astrid: Contando las vidas y las historias detrás del producto en la Sección Comunidad. La certificación ecológica no siempre es el elemento clave; para nosotros es importante el modo de hacer, podemos decir que este es uno de los factores principales que nos lleva a elegir un productor para nuestra red. Nos gusta la idea de crear una sinergía, para que entre los mismos productores colaboren y difundan acciones de cooperación.

Carmen: A través del trato directo con los productores. Esta oferta al consumidor la podemos garantizar gracias a ¡La colmena que dice sí!, una plataforma online desarrollada en Francia en 2010 y que se ha difundido en toda Europa. Apoyándonos a esta red podemos acercar los productos de payeses a las personas que viven en la ciudad. La recogida de los productos se hace en la sede de la agencia. Queremos que este espacio sea además un lugar de convivencia y encuentros, donde una vez por semana los productores encuentran los consumidores y donde se organizan talleres y eventos relacionados con el estilo de vida slow.

Todas las imágenes son de Bérengère Sarrazin

Agradezco al equipo de SlowMov por contarnos más de su historia y quería destacar uno de sus interesantes desafíos: difundir una cultura del café consciente, respetuosa y sostenible. La agencia, de hecho, es especializada en venta de cafés procedentes de diferentes regiones del mundo, que cambian según la temporada y son comprados directamente a los pequeños productores. Además, periódicamente se organizan catas de degustación y talleres para conocer más sobre la tostadura y otros aspectos del café.

Os dejo con esta entrevista con Carmen y François de SlowMov para que podáis descubrir más sobre este proyecto.